Mi cara de sorpresa fue mayúscula cuando al abrir el
email comprobé la fecha de anillamiento de la espátula…25 de marzo de 1988.
Tuve que verlo varias veces porque no daba crédito. ¡Tenía algo más de 29 años!
Este era el final, pero la historia para llegar hasta aquí, ha sido larga y muy curiosa.
Todo comenzó una preciosa mañana de abril, más
concretamente el día 21, viernes, día que entraba un poco más tarde a trabajar
así es que decidí amanecer en las Lagunas de Villafáfila para después continuar
hasta mi lugar de trabajo. Fue un gran día de espátulas porque pude ver 59 en
total: 36 en Villarrín y 23 en la Salina Grande. Mi primer punto de observación fue La Laguna de San Pedro (Villarrín) donde había dos grupos de espátulas.
36 espátulas en total; en dos grupos de 17 y 19
ejemplares cada uno. En el primer grupo había dos anilladas y en el segundo
otras dos. Solamente me dio tiempo a ver las dos anilladas del grupo de 17
porque las otras volaron en seguida con lo cual me centré en esas dos que me estaban dando algo más tiempo para intentar leerlas.
Una la leí sin problemas: NfGP/aNP; pasados un par de días recibí su historial. Fue anillada
el 11-6-2015 en Holanda por Leon Kelder y esta era su primera observación fuera
de Holanda.
La otra espátula anillada era rara, bueno, más bien fue
un auténtico quebradero de cabeza porque el color de su anilla de PVC era
naranja oscura o rojo desgastado y sus dígitos negros.
¿Qué color era? ¿Habría algún proyecto con naranja o rojo
con dígitos negros? La búsqueda de donde podría ser comenzó ese mismo día.
Después de consultar a varios expertos y anilladores, las anillas rojas tenían
que tener los dígitos blancos y esta los tenía negros así es que no podría ser,
¿o si? ¿y si eran blancos y estaban sucios? Por lo que mandé un email a un
proyecto italiano que tenía esas características. ¿Y si fuera naranja? Esta me
decían que no existía con lo cual el lío era total.
Pasadas varias semanas recibí contestación del proyecto
italiano diciéndome que esa anilla no era de ninguno de sus proyectos con lo
cual se me acabaron las opciones y la dejé por imposible.
La historia continuó el 20 de agosto. Junto con mis amigos Ernesto e
Hipólito Hernández, en Puebla de Sanabria pude ver otra espátula anillada: RJP
Su anilla era blanca con dígitos negros y estaba anillada
en Doñana pero el anillador no había metido ningún dato, con lo cual, no hay nada
de ella pero, lo que me abrió los ojos, fue la charla que tuvimos sobre el
color de la anilla. Viéndola en directo parecía blanca pero no se veía blanca ya que tenía un color
hueso-amarillento-anaranjado que nos hacía dudar pero tenía que ser blanca.
A las dos semanas de verla me vino a la mente la espátula
que había visto en abril con la anilla naranja oscura o rojo descolorido; ¿y si
era blanca? ¿Y si era blanca y estaba tan manchada y desgastada que se veía de
ese color? Inmediatamente introduje los datos en la página de la Estación
Biológica de Doñana (EBD) y…bingo. ¡Apareció! Estaba registrada.
Mientras tanto, hablé con J.M. San Román (al cual le agradezco enormemente todas sus gestiones y consejos), amigo y
anillador del Grupo Ibérico de Anillamiento (GIA) para contarle la nueva posibilidad.
Le mandé las fotos, nuevamente, para ver que opinaba sobre la posibilidad de
que pudiera ser blanca y él, a su vez, se las mandó a Rubén R. Olivares, anillador de Doñana (al cual también agradezco enormemente su ayuda y predisposición), para
que diera su opinión; confirmando el color blanco de la anilla ya que les había
pasado lo mismo con otras.
Pasaron unos días
y recibí el email con el que empecé esta entrada. La espátula con anilla blanca
y dígitos negros: AB4 había sido
anillada el 25 de marzo de 1988 en el Paraje Natural de las Marismas de Odiel
(Huelva) con lo cual tenía 29 años y un mes. Algo realmente increíble. Una auténtica superviviente.
Como he comentado en otras ocasiones me gusta
especialmente descubrir aves anilladas, leerlas, buscar su procedencia y saber
algo de su historia. He podido descubrir historias muy curiosas, aves de más de
más de 20 años pero nunca una de casi 30.
Su historial es muy curioso porque ha sido vista
en quince ocasiones, todas en Huelva o Sevilla, hasta el año 2000 y, desde
entonces, nada de nada hasta esta observación 17 años después aunque, no me
extraña, ya que para poder leerla hay que tener mucha suerte (buena luz, cercanía,...) y, además, el color
de la anilla es todo un problema porque decir que es blanca es toda una utopía.
¿Cuánto puede vivir una espátula? Fue la primera pregunta que me vino a la mente cuando vi su fecha de anillamiento. Por lo visto, la edad media, está entre 15 y 20 años pero en muchas ocasiones llegan alrededor de los 25 y, en alguna ocasión, cerca de los 30. Da la tremenda casualidad que, por puro azar, descubrí que había otra espátula, con anilla blanca y dígitos negros.
¿Cuánto puede vivir una espátula? Fue la primera pregunta que me vino a la mente cuando vi su fecha de anillamiento. Por lo visto, la edad media, está entre 15 y 20 años pero en muchas ocasiones llegan alrededor de los 25 y, en alguna ocasión, cerca de los 30. Da la tremenda casualidad que, por puro azar, descubrí que había otra espátula, con anilla blanca y dígitos negros.
Agradezco enormemente a Alberto Pastoriza su rápida contestación y el prestarme sus fotos para esta entrada. |
La AC1 que también había sido vista en mayo de este año en el Paraje
Natural de las Marismas de Odiel (Huelva) ¡¡con 29 años!! (con la anilla perfectamente blanca) e, increíblemente, fue
anillada el mismo día, el mismo año y en el mismo lugar que la que yo había
visto en las Lagunas de Villafáfila, ¡increíble! Dos espátulas con casi 30 años
anilladas el mismo día y en el mismo lugar. Dos auténticas supervivientes que nos vuelven a
demostrar lo sorprendente y fascinante que es la naturaleza. Naturaleza que nunca dejará de sorprendernos.