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jueves, 15 de noviembre de 2012

Vida en el río Duero a su paso por Zamora I.

El río Duero está íntimamente ligado a Zamora. Ha sido vertebrador de la ciudad, protector, fuente de vida y riqueza, lugar de esparcimiento, paseo y deporte. El río Duero y Zamora van unidos inexorablemente hasta la eternidad.
Mis abuelos vivían en una de sus orillas; antes de llegar al puente de piedra, en la orilla derecha, mi abuelo tenía su taller de carpintería con su fachada rosa que durante muchos años fue lugar de reunión en la Zamora de los años cincuenta, sesenta y setenta de futuros pintores, escultores, músicos, escritores o tallistas como Antonio Pedrero, Ramón Abrantes, Coomonte, Claudio Rodríguez, Julio Mostajo, Alito, Alberto de la Torre Cabero, Arturo, Miguel Pérez, Ricardo Flecha (padre), Alfonso Bartolomé, Jesús Hilario Tundidor, Castilviejo, Julio "el escayolista", Tomás Crespo o Miguel Berdión entre otros, a hablar, componer, tocar música o a que mi abuelo les prestara una madera, un lienzo, un bastidor o unas pinturas. Eran jóvenes artistas y amigos de mis tíos que buscaban un futuro que les sonrió y cuando se hicieron importantes siempre que podían bajaban a ver al señor Manolo y a la señora Angelita; ahí es cuando yo los veía y me admiraba que gente tan importante bajara por allí, por el taller, por una simple carpintería; siempre fueron agradecidos y bastantes años después muchos participaron en un homenaje que le hicieron a mi abuelo con una exposición.
En ese taller pasé gran parte de mi vida. Ese taller forjó mi carácter y ese taller se encontraba al lado del río donde mi abuela o mi madre, de niña, lavaban la ropa en su orilla, se cogía una barca para pasear por sus aguas o se pescaba para la comida. En ese río veíamos multitud de animales. Ese río marcó los barrios bajos. Ese río marcó la ciudad.
Voy muy a menudo a pasear por sus orillas o a hacer deporte. Ese taller ya no existe. Se cerró hace muchos años pero cada vez que paso siempre se me escapa una mirada o una sonrisa.
Es un río lleno de vida. Un río cuyas aguas chocolate están llenas de vida y es, a esa vida, a la que me quiero referir en esta entrada. En ella voy a hablar de las aves que te puedes encontrar un día cualquiera paseando por sus orillas, solamente hace falta tener un poco de suerte. Me referiré a las aves o animales que tienen que ver algo con el agua, que puedes encontrarte en ella o en sus orillas; sin referirme a la fauna que habita en los árboles de su ribera, estos serán otra entrada.
Nidos de garza real en la isla.
Dependiendo de la época del año te encontrarás con unos animales o con otros, así es que voy a exponerlos un poco en general, aunque la época que más me gusta es el invierno con sus nieblas, sus fríos y sus heladas.
Vamos a comenzar un paseo virtual por su orilla derecha, remontando el río, y lo haremos en el barrio de Olivares donde lo primero que verás serán las garzas reales que, en la isla de enfrente, tienen una buena colonia y que puedes ver prácticamente todo el año posadas en sus orillas o volando río arriba o río abajo. De vez en cuando alguna garza imperial se deja caer por allí. Los martinetes también son asiduos a esta zona así como las nutrías que al final del paseo, enfrente del desagüe, se pueden ver, con mucha suerte, por la mañana cruzando el río o algún martín pescador que con su azul metálico destacará como una luz o los somormujos, tan elegantes y llamativos.
Martinete.
Tomando el sol de la mañana.
Andarríos chico junto al puente del tren.
En los carrizos de todo este tramo nos encontraremos con avetorillos, carriceros y gallinetas que van de unos a otros mientras los galápagos toman el sol. Llegamos hasta la zuda que va desde las aceñas hasta casi el puente de piedra. Tanto en esta como en la siguiente, la que está pasado el puente de piedra hasta el de hierro, nos podremos encontrar con multitud de habitantes como son las cigüeñas, los cormoranes, las garzas reales, garcillas bueyeras, garcetas grandes o comunes. También aparecerán andarrios grandes o chicos que buscan comida entre las pequeñas cascadas que oxigenan el agua del río.
De izquierda a derecha: garcilla bueyera, cigüeña, garza real y cormorán.
Foto testimonial de una nutria cruzando el río.
En este tramo he podido ver a la nutria, siempre a primera hora de la mañana, al amanecer nadando entre puentes o en la zuda en busca de posibles presas.
En todo el río nos encontraremos con los azulones, los cormoranes y las gallinetas. Estos tres son habitantes comunes y abundantes que se mueven sin problemas por cualquier tramo del río.
Pareja de azulones aseándose sobre un árbol.
Pareja de gallinetas pasando delante de un macho de azulón.
Pasado el puente de hierro y el puente del tren nos encontraremos con un peculiar grupo de gansos, ocas y patos domésticos e híbridos que desde hace unos dos años se mueven libremente por esta zona y se acercan a las orillas en busca de algún paseante que les eche comida. También en esta zona he podido ver algunas fochas que de vez en cuando aparecen asociadas a estos grupos.
Si continuamos por el canal que forma el río es común ver a garzas reales en la orilla opuesta dispuestas para capturar cualquier pez que se les ponga a tiro. 
Garza real intentando pescar algún pez.
En este tramo también he podido observar, sobre todo los dos últimos inviernos, alguna rata de agua que se movía siempre en la misma zona teniendo en la orilla su madriguera. La rata de agua es un animal en regresión y verla siempre es una satisfacción.
Grupo de cormoranes sobre la zuda.
Llegamos a la siguiente zuda en el puente de la autovía donde nuevamente encontraremos lo más común (patos, cormoranes o gallinetas). Al pasar este puente podemos continuar por la orilla o pasar a la isla. Si continuamos por la orilla, entre este puente y el siguiente, se puede ver nuevamente al martín pescador que se mueve de un árbol a otro. Si queremos continuar nuestro paseo llegaremos hasta la desembocadura del río Valderaduey donde una familia de nutrias se mueve entre el agua y los campos, donde en alguna ocasión se han visto correteando.
Si por el contrario queremos pasar a la isla nos encontraremos con la fauna más común del río que he citado anteriormente. También he llegado a ver alguna rata de agua e incluso una comadreja que se movía rápidamente entre las hierbas de la isla.  
Esto es un pequeño resumen de algunos, hay más, de los animales que podemos ver en un paseo por la orilla derecha del río Duero a su paso por Zamora; en él se pueden disfrutar de multitud de animales que hacen su vida sin que muchos de nosotros nos demos cuenta de la gran importancia y variedad de vida que tiene nuestro río aunque en muchas ocasiones aparezca con basuras que nosotros, los zamoranos, tiramos sin sentido.  
Joven gallineta nadando junto a una sucia botella.
Pero el río es más. Multitud de aves y animales crían en sus orillas y ribera, e incluso cruzan el río de una orilla a otra o simplemente vienen a beber. Todo esto será el tema de una nueva entrada de la vida en nuestro río Duero a su paso por la ciudad de Zamora.

6 comentarios:

  1. Es de recibo que en alguna ocasión recordemos y pongamos de relevancia, como tú en esta entrada, a nuestro preciado río Duero.
    No sólo debemos destacar su importancia como sustento de la vida animal y vegetal sino recordar también que el hombre, a lo largo de generaciones y culturas, ha tenido una dependencia innegable de ese medio.
    Por tanto, cuidarle y sostenerle es 'de ley' y crónicas como la que acabamos de leer, son la mejor motivación para ello.
    Un saludo desde Pucela.

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    1. He pasado mucho tiempo de mi vida muy cerca del río Duero y desde pequeño te enseñaban a respetarlo y a tenerle cuidado. Respetar sus orillas, no tirar basuras, observar a los animales,... y a tenerle cuidado ya que el río era peligroso, simplemente había que ir con cabeza. También nos hablaban de lo importante que era para Zamora a diferentes niveles: agua, pesca, molinos, regar, lavar, comunicación, defensa...Mis abuelos y tíos contaban historias del río y aprendías escuchándolos. No sé sí ahora se enseñan esos valores pero desde luego a nosotros nos los enseñaron. Gracias por el comentario. Un saludo.

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  2. Es una zona preciosa y con un potencial tremendo....lastima esa nutria no te hubiera dado un segundo más.
    Salud!!

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    1. Como bien dices la zona es muy bonita y de buen potencial. Lastima la nutria. Nunca he podido hacerles unas fotos decentes. Esa foto concreta la hice con una cámara pequeña,normal y corriente. Espero pillarlas algún día con una cámara decente. Un saludo y gracias por el comentario.

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  3. ¡No tenía ni idea de que tuviésemos nutrias tan cerquita!

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    1. Así es. Las tenemos en nuestro río a su paso por la ciudad. No es fácil verlas pero a horas determinadas se pueden observar en varios puntos del río. Un saludo y gracias por el comentario.

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