miércoles, 21 de diciembre de 2022

¡Feliz Navidad!

A todos los que leeis este blog ya sea de forma fiel, por casualidad o esporádicamente. Os deseo:

lunes, 12 de diciembre de 2022

Dos ánsares daneses con una hermosa historia.

Entre los pocos ánsares comunes que tenemos en la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila se encuentran dos ejemplares muy especiales. Dos ánsares que están marcados con collar y anilla con una historia muy hermosa y particular.
Los dos fueron vistos por primera vez el 2-12-22; D077 fue visto por Gary Losada y D068 por Joao Tomás. He podido verlos los días 3 y 4 y descubrir su hermosa historia. Ánsares anillados en Dinamarca por Henning Heldbjerg (Departamento de Ecociencia de la Universidad de Aarhus) que han resultado ser los primeros ánsares anillados en ese país que se han visto en las Lagunas de Villafáfila.
El día 3 de diciembre los pude ver en las lagunas. D077 lleva un collar azul y además una anilla igual en su pata. D068 solamente lleva anilla azul con dígitos blancos en su pata. Ver un ánsar con anilla es realmente raro, normalmente se les pone collar ya que al llevarlo en el cuello es el lugar más visible para poder verlo y leerlo en la distancia.
Ese es el primer dato que me resultó muy curioso y el segundo era que, tras estar observándolos durante bastante tiempo, me di cuenta que iban siempre juntos, no se separaban en ningún momento.
En esta fotografía se puede ver
 a la izquierda a D068 (con anilla) y a D077 con collar.
Cuando he podido ver ánsares que no se separan unos de otros y que han sido vistos en diferentes lugares de Europa era porque tenían algún vínculo, alguna relación entre ellos como pude constatar con LZ5 y LB2 que eran una pareja (los ánsares se emparejan de por vida) anillados por Arne Follestad en Noruega y que se han visto juntos en Noruega, Holanda, La Nava (Palencia) y aquí en Villafáfila o ZE1 y ZE7, dos ánsares que habían sido anillados el mismo día, en el mismo sitio de Noruega por Arne Follestad, seguían juntos en Villafáfila y formaban parte de la misma pollada. Como sucedía con UD5-UD6 y UE2. Los tres fueron anillados el 18 de julio de 2019 en el mismo lugar de Noruega por Arne Follestad. Después, volvieron a ser vistos, en otro punto de Noruega; desde ahí pasaron a Holanda donde fueron vistos en dos zonas diferentes. De ahí hasta las Lagunas de Villafáfila. Fueron anillados como adultos no reproductores con lo cual es muy difícil saber si son o no son miembros de una misma pollada pero, presumiblemente puede que lo sean y, seguramente, alguno de los otros ánsares con los que van también pueda ser hermano de ellos.
Si estos dos ánsares daneses iban juntos era porque debían de tener alguna relación así es que me puse en contacto con su anillador: Henning Heldbjerg (Departamento de Ecociencia de la Universidad de Aarthus) que muy amablemente me informó de toda su historia. Al cual quiero dar las gracias por su amabilidad y predisposición.
Lugar de anillamiento en Dinamarca y lugar de observación en Villafáfila.
Lugar de anillamiento:isla de Agersø (Dinamarca). .
D077 el día de su anillamiento.
D077
y D068 fueron anillados en la pequeña isla de Agersø el 1-6-2022. Se anillaron unos 50 ánsares comunes de los que 35 eran pollos. Todos los adultos eran aves reproductoras y estaban mudando como D077 que es un macho mientras que a los pollos solamente se les puso una anilla en la pata como a D068 porque eran muy pequeños cuando se les anilló. Estos dos ánsares comunes eran el macho adulto y su pollo.
Fotografía los dos juntos en Villafáfila el 4-12-22.
Pollo que lo seguirá allá donde vaya. Pollo que necesita aprender. Pollo que no se separará en ningún momento de su padre (la madre seguramente también esté en el grupo pero no se le anilló). Pollo que observará e irá aprendiendo lo que necesita para sobrevivir. Aprenderá el camino de ida y de vuelta desde su Dinamarca natal hasta Villafáfila, dónde debe de parar a descansar y alimentarse, se fijará en ríos, valles, ciudades, bosques para orientarse; seguirá a su padre en las Lagunas de Villafáfila para saber que comer, donde comer, donde descansar, donde dormir, los peligros…aprenderá a sobrevivir y su padre (y seguramente su madre que también estará en el grupo) le guiarán y enseñarán todo lo necesario para subsistir. Una preciosa historia de aprendizaje.
Tanto D077 como D068 han sido vistos en Países Bajos. D077 los días 1, 15 y 23 de noviembre. D068 fue visto el 15-11-2022 en el mismo lugar que su padre, es decir, iban juntos, aunque no se viera los otros días, es complicado verle la anilla desde lejos, estoy convencido que iban juntos. Poco más de una semana después de ser vistos en Países Bajos aparecieron en las Lagunas de Villafáfila donde esperemos que pasen todo el invierno.
Desde hace 20 años los ánsares comunes anillados en Dinamarca vistos en España han bajado de forma exponencial, cada vez se ven menos. Observaciones concentradas en el Parque Nacional de Doñana (Huelva), una en la zona del País Vasco y estas de Villafáfila.
Observaciones de ánsares daneses con collar desde el 2000.
Henning Heldbjerg, su anillador, me confirma que: “Sus avistamientos son los primeros encontrados en España de esta población de Agersø. Hace algunas décadas, casi todos los ánsares daneses se trasladaban a España durante el invierno, pero cada vez más permanecen en Holanda o cerca de Dinamarca en la actualidad”.
Fotografía realizada por José Javier Orduña hoy mismo, 12-12-22.
En el grupo de ánsares adultos que anillaron a algunas hembras les pusieron un collar con Gps. Ninguna de estas hembras ha bajado más allá de Países Bajos.
Una de las hembras anilladas con collar GPS.
Como bien es sabido la invernada del ánsar común en España está a punto de desaparecer, por lo menos, como la conocíamos, esos miles de ánsares que venían ya no lo hacen. Esta enorme bajada, lógicamente, la podemos también comprobar en los ánsares con collar que han sido vistos. Esta tabla muestra la evolución de los collares que he visto en los últimos años:
La invernada del ánsar común se muere. Agoniza. Vienen muchos menos y además llegan más tarde y están menos tiempo pero como dirían en Asterix y Obelix: un grupo de irreductibles ánsares resiste todavía y siempre al cambio de invernada, al cambio climático y a cualquier contratiempo.
(Quiero agradecer enormemente a Henning Heldbjerg su amabilidad y predisposición para facilitarme información y sus fotografías. Al igual que a Gary Losada y José Javier Orduña.)

jueves, 8 de diciembre de 2022

Dos ánsares campestres de la Tundra en Villafáfila.

El pasado día 2 de diciembre Gary Losada descubrió en la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila dos preciosos ánsares campestres de la Tundra. ¡Enhorabuena Gary!
Ánsar que llega hasta nuestra tierra de una forma muy escasa y ocasional mezclado con los grupos de ánsar común. Imaginemos que en vez de ver uno o dos cada ciertos años pudiéramos ver miles…algo que nos parece impensable actualmente pero que ocurría en la provincia de Zamora.
El embalse de Ricobayo es uno de los principales embalses de la provincia. Se construyó entre 1929 y 1935 en el río Esla, suponiendo una enorme transformación del entorno ya que ocupa casi 6.000 hectáreas y divide la provincia en dos partes: al oeste, la comarca de Aliste y, al este, Tierra de Campos.
Uno de los principales hechos históricos, a nivel ornitológico, acaecidos en este embalse fue que durante muchos años era el principal lugar de invernada del ánsar campestre (ahora ánsar campestre de la Tundra) en nuestro país.
En el libro: “El ánsar campestre y el ánsar común en Castilla y León” de Mariano Rodríguez y Jesús Palacios se menciona que entre 1968 y 1981 este enclave es el principal y prácticamente único punto de invernada del ánsar campestre en España.
Que lejos quedan los tiempos en los que los ánsares campestres invernaban en la provincia de Zamora por miles; en 1968-69: 6.000 ánsares campestres invernaban en la provincia de Zamora siendo uno de los lugares principales de invernada en España y su último reducto.
Su número fue decayendo paulatinamente en nuestra provincia; todavía en 1981 había 3.800 ánsares campestres que continuaban viniendo a pasar el invierno, en 1982: 3.000, en 1983 se produjo una enorme bajada hasta los 1.400 ejemplares, en 1984: 925; 1985: 792; 1986: 450 y así hasta 1991, año en el que vinieron 157. En la década de 1990-2000 continuaron viniendo en muy escaso número pero es a partir de la entrada en el s.XXI cuando prácticamente desapareció y, actualmente, ver alguno es algo extraordinario.
El ánsar campestre de la Tundra es un ganso realmente hermoso, es algo más pequeño que el ánsar común, con la cabeza marrón oscura, las patas anaranjadas y el pico oscuro con una mancha-franja naranja. Ánsar que cría en la lejana tundra siberiana.
Está decadencia absoluta, según los autores anteriormente citados, se produjo por diferentes razones: “…hayan encontrado mejores zonas de invernada en Centroeuropa y hayan preferido poco a poco quedarse en dicho lugar, en vez de en zonas más alejadas……modificaciones en su hábitos de invernada…existe una notable coincidencia de fechas entre la Concentración Parcelaria de sus pastaderos y el comienzo de su declive, aunque no podemos afirmar que dichos hechos estén relacionados”.
Seguramente, un cúmulo de todas estas circunstancias (a las que se pueden añadir la caza o los problemas en sus zonas de alimentación), provocó su decadencia paulatina al igual que le ha sucedido al ánsar común en los últimos años en los cuales, sus números, han bajado desde los casi 40.000 en 1999 hasta los 500-600 que hay actualmente en Villafáfila.
Fotografía en la que podemos ver juntos
 a los 2 ánsares campestres de la Tundra,varios ánsares caretos
 y ánsares comunes.
Si cada vez vienen hasta nuestras tierras menos ánsares comunes también baja enormemente la probabilidad de que entre ellos aparezca algún otro tipo de ánsar infiltrado que no sea el común como los ánsares campestres de la Tundra, los ánsares caretos o cualquier tipo de barnacla. Aunque este año está rompiendo la probabilidad estadística ya que, actualmente, en un grupo de unos 500-600 ánsares comunes se encuentran estos 2 ánsares campestres de la Tundra y 9 ánsares caretos. Todo un lujo para los pocos ánsares que hay en las lagunas de Villafáfila (y en España) poder ver juntos estas tres especies de ánsares.
Esperemos que se queden toda la temporada invernal y podamos disfrutarlos porque son una verdadera rareza y muy hermosos.

jueves, 1 de diciembre de 2022

Flamenco en Coreses (y mis observaciones en Zamora).

No iba a pasar por ahí. No tenía que pasar por esa zona pero la casualidad quiso que según volvía a Zamora decidiera asomarme a alguna de las graveras de Coreses a ver que había y surgió la sorpresa: un flamenco común de primer invierno descansaba en una de ellas. Primera observación de esta especie en este lugar y octava cita para la provincia de Zamora. Toda una enorme y agradable sorpresa.
El flamenco era considerado por los egipcios como una extraña ave que ardía cada día para resurgir de sus cenizas al día siguiente; los griegos y los romanos continuaron con ese mito del Ave Fénix que ha llegado hasta nuestros días.
El flamenco común no es frecuente verlo en la provincia de Zamora. Solamente hay 8 citas: 6 en la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila, 1 en el embalse de Ricobayo y esta en las graveras de Coreses.
Es la quinta vez que veo un flamenco en la provincia de Zamora. Me gustaría recordar cada una de las observaciones que he tenido de esta especie.
La primera vez que vi un flamenco en la provincia de Zamora todavía no estaba metido en el apasionante mundo de las aves. Me acuerdo que lo vi y me llamó poderosamente la atención. Fue una visita dominguera al centro de interpretación de las Lagunas de Villafáfila donde la estrella del momento era un flamenco juvenil que en 2002 estuvo varios meses en el centro.
Los principales pigmentos que dan color a las aves son las melaninas y los carotenoides. Los carotenoides se adquieren mediante la dieta y son transformados en pigmentos mediante la acción de encimas; eso es lo que sucede con los flamencos que van adquiriendo su color rosa por la alimentación de pequeños crustáceos que acumulan gran cantidad de carotenos. Por lo tanto el típico color rosa lo van adquiriendo a lo largo del tiempo.
Como rosas eran los siguientes flamencos que aparecieron en la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila. Dos preciosos adultos que descubrieron el 10 de marzo de 2014 Álvaro Guerra y Víctor Arias. Flamencos que causaron gran curiosidad y que era increíble verlos por la Salina Grande.
Allí estaban. Como dos gigantes en un mundo de liliputienses. Su color espectacular. Sus largas patas. Su cuello esbelto. Se movían tranquilamente por la salina en busca de comida. Su característico pico curvado filtraba el agua para conseguir cualquier materia nutritiva que llevarse al estómago. Todo un espectáculo en mitad de las salinas.
La siguiente observación fue un ejemplar de segundo año descubierto por Joan Ximenis el 27 de mayo de 2017 también en las Lagunas de Villafáfila. Ejemplar que apareció en un charco, el único punto de agua que quedaba en las lagunas que ya se habían secado siguiendo su ciclo natural. Ejemplar de segundo año al que ya se le podía vislumbrar un ligero tono rosáceo por los flancos como al siguiente flamenco que apareció en la provincia de Zamora.
Otro segundo año que descubrieron el 20 de junio de 2021 Miguel Ángel Matellanes y Juan José González en el embalse de Ricobayo. Flamenco del cual tengo un magnífico recuerdo porque mi pequeña me dijo: “Papi quiero ir a verlo”. Mi pequeña quería ir y eso era una oportunidad que no podía dejar pasar así que nos presentamos en el embalse donde el tiempo nos indicaba que estábamos en octubre y no en una mañana de junio: frío, viento y lluvia hacían que el día estuviera muy complicado pero que disfrutamos enormemente. Fue el primer flamenco que vio mi pequeña.
Y llegamos hasta el flamenco que pude descubrir el pasado 21 de noviembre en las graveras de Coreses.
Flamenco curioso que estaba sumergido hasta el cuerpo y que metía todo su largo cuello en el agua para intentar comer, nadaba como un pato y tenía un aspecto preocupante. Era increíble verlo allí, suponía que cuando descansara un poco continuaría su viaje y desaparecería como así hizo y desapareció a mediodía del día siguiente.
Pero la naturaleza te sorprende constantemente y hoy, 1 de diciembre de 2022, mi amigo y gran biólogo Miguel Rodríguez me manda un mensaje y una fotografía del mismo ejemplar que se ha movido 52 km al sur y lo ha encontrado J.C. Zamarreño en Pedrosillo el Ralo (Salamanca).
Gracias Miguel Rodríguez por estas impresionantes fotografías.
Flamencos que van cogiendo su color rosado según van teniendo más edad. Flamencos que como este de primer invierno tienen una vida dura y complicada llena de peligros.
(Después de la realización de esta entrada, el día 6 de diciembre, Miguel Ángel García Matellanes lo volvió a ver en el mismo punto de las graveras de Coreses (Zamora). Volvió. A día de hoy 12-12-22 continua).

viernes, 18 de noviembre de 2022

¡9 Falaropos picogrueso juntos en las Lagunas de Villafáfila y 12 en la provincia de Zamora!

Al terminar de trabajar me dirigía hacia las Lagunas de Villafáfila cuando saltó la sorpresa. Ángel Álvarez, Yolanda Ruiz y José Antonio López habían visto 7 falaropos picogrueso juntos. Al llegar estaba Alfonso Rodrigo que había visto 9 simultáneamente (8 juntos en una zona y 1 solitario en otra).
Nunca se habían visto tantos juntos en el interior peninsular. La máxima cita en Villafáfila es de 2 ejemplares vistos por J.M. Devesa el 28-11-2003 (datos del fantástico archivo de Alfonso Rodrigo. Muchas gracias). Ahí estaban. Inconfundibles en la lejanía que supone observar en Villafáfila.
Al poco de estar observándolos llegaron más amigos a disfrutar de la impresionante cita. José Javier Orduña y Gary Losada se me unieron en la increíble observación del grupo de falaropos. Según estábamos mirándolos apareció otro volando que se les unió: ¡¡¡9 falaropos juntos!!! No salía de mi asombro. Ver 9 falaropos juntos es impensable, inimaginable.
Pequeños pájaros provenientes de la tundra ártica de Islandia, Noruega o Rusia que han parado en Villafáfila durante su viaje hasta sus zonas de invernada en las costas africanas del oeste y el sur.
El grupo se movía nervioso, inquieto. No paraban en ningún instante de buscar insectos en la superficie del agua que comían con enorme rapidez para buscar otro y otro y otro. Necesitan reponer fuerzas rápidamente y acumular grasa para continuar su largo y peligroso viaje.
Se podía apreciar perfectamente su sorprendente y curiosa forma de alimentarse: dan vueltas en círculos en aguas poco profundas para revolver el fondo y alterar a sus presas para hacer que se acerquen a la superficie y así poder capturarlas.
Estos pequeños falaropos de blanco inmaculado, pico negro, corto y grueso, gris en la parte superior y negro entorno al ojo son completamente diferentes en época de cría, su transformación es espectacular, sobre todo en las hembras, con un plumaje rojizo pardo y negro, con mejillas blancas, vientre rojo, píleo negro y parte superior del cuerpo oscura con bordes claros; una verdadera preciosidad.
Extraordinaria fotografía de Manuel Segura al falaropo picogrueso
 descubierto ayer (17-11-22) por Juan José González en Mombuey.
En España es un invernante muy escaso (solamente en zonas de la costa cantábrica, Galicia y costa atlántica de Andalucía) pero es un migrante regular en sus movimientos desde sus zonas de cría en la tundra ártica y su zona de invernada en las costas africanas.
Fotografía de Alfonso Rodrigo del falaropo picogrueso
que descubrió el 17-11-22 en Valdellope (embalse de Ricobayo).
Muchas gracias por la fotografía.
Allí estaban, en la laguna, alimentándose sin parar en un constante frenesí de búsqueda del alimento que les debe de dar fuerzas para continuar su largo viaje. Me admira que un ave tan pequeña tenga la fuerza, orientación y capacidad suficiente para viajar miles de kilómetros desde su zona de cría en el Ártico hasta sus zonas de invernada. Miles de kilómetros recorridos en un viaje lleno de peligros. Miles de kilómetros realizados por un pequeño limícola de 21 cm de longitud; me impresiona.
Descansarán y se alimentarán hasta que consideren que ha llegado la hora de reemprender su larga marcha hasta el sur donde invernarán para volver hasta la otra punta del planeta en primavera y comenzar un curioso ciclo reproductivo en el que las hembras, más vistosas que los machos, se encargan de defender un territorio y, una vez que han puesto los huevos, será el macho el encargado de incubarlos y cuidar a los pequeños.
Extraordinaria fotografía de Manuel Segura
del falaropo picogrueso en Mombuey. Gracias y enhorabuena.
Hoy (18-11-22) se han visto en la provincia de Zamora 11 falaropos. Los 9 de Villafáfila más 1 en Villardeciervos descubierto por Juan José González y otro en Mombuey que descubrió ayer Juan José González y que sigue hoy presente. A estos 11 de hoy hay que sumarle otro descubierto por Alfonso Rodrigo ayer (17-11-22) en Valdellope en el embalse de Ricobayo y 2 que vio Daniel García en Villafáfila (supongo que serán de los de hoy); con lo cual son ¡¡¡12 falaropos picogrueso!!! en dos días en la provincia de Zamora ¡Impresionante! 

jueves, 17 de noviembre de 2022

Correlimos menudillo, gaviota del Caspio y mucho mas en el entorno de Arteixo.

El pasado puente nos acercamos hasta Arteixo, una localidad situada muy cerca de A Coruña desde la que recorrimos su entorno privilegiado de playas, dunas y paseos. En ella vive Xabi Varela una persona amable y paciente con una enorme sabiduría al que quiero dar las gracias enormemente por sus consejos, indicaciones y su magnífica compañía. Xabi es de un hablar tranquilo que rebosa sabiduría por los cuatro costados, indicaciones claras y explicaciones precisas, muchas gracias Xabi.
En estos días pude ver 79 especies de las cuales tres eran nuevas para mi: correlimos menudillo, gaviota del Caspio y estrilda.
Impresionante fotografía del correlimos menudillo de Manuel Segura
al que le agradezco enormemente cedérmelas
 para que ilustren parte de esta entrada.
Gracias y enhorabuena por las fotografías.
El correlimos menudillo es la estrella del momento. Pequeñísimo correlimos descubierto por Damián Romay que se encuentra en el embalse de Cercebre (Abegondo-A Coruña).
Pequeño correlimos americano que cría entre Alaska y Terranova e inverna hasta el norte de Chile y el este de Brasil. Sorprende cuando lo ves por su tamaño, más pequeño que un correlimos menudo; es el correlimos más pequeño.
Montaje comparativo de dos magníficas fotografías de Manuel Segura
 en la que se puede ver a la izquierda un correlimos menudo
y a la derecha un correlimos menudillo.
Entre correlimos comunes, zarapitines y chorlitejos grandes parece un liliputiense en un mundo de Gulliver. Su vuelo es de un agitar muy rápido de alas como cuando vuela una mariposa. Sus patas amarillas destacan como pequeños faros en la orilla lodosa del embalse. Embalse lleno de vida en el que un ibis sagrado o un morito destacan entre las gaviotas patiamarillas, espátulas y garzas.
Es verdaderamente increíble que un ave de 15 cm de largo y 21 gramos de peso haya recorrido unos 5.000 km atravesando el océano atlántico para llegar hasta aquí.
Correlimos menudillo en el embalse de Cercebre (Abegondo-A Coruña).
En menos de una semana he podido ver y disfrutar dos correlimos americanos: el correlimos menudillo (Calidris minutilla) del embalse de Cercebre (A Coruña) descubierto por Damián Romay y el correlimos de Baird (Calidris bairdii) que descubrieron Alfonso Rodrigo y José Javier Orduña en la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila (ver entrada aquí). Dos auténticos pelotazos. Enhorabuena a todos y gracias.
Una especie que tenía muchas ganas de ver era la gaviota del Caspio (Larus cachinnans). Gaviota grande y potente que pude ver con Xabi Varela en Baldaio.
Baldaio es un lugar fantástico; es un tres en uno: playa, marisma y laguna. Lugar privilegiado para observar la gran variedad de aves que llegan hasta allí para descansar en su viaje de migración o que vienen a criar o pasar el invierno.
Dunas de tres kilómetros que separan la playa de la laguna y las marismas. Lugar que Xabi Varela conoce como la palma de su mano. Lugar del que habla con verdadera pasión demostrando todo el cariño que le tiene. Lugar lleno de vida en el que al minuto de poner el telescopio Xabi dijo: “Gaviota del Caspio”. A lo que le contesté: “No me digas nada que quiero encontrarla yo”.
Una vez que la localicé Xabi comenzó su clase magistral en directo. Estás viendo a la gaviota del Caspio de primer invierno y Xabi te está narrando sus principales características que puedes ir descubriendo según él habla: “Cabeza blanca, pequeña, ojo pequeño, sin máscara oscura alrededor del ojo, patas con tibias muy largas…”. Da gusto oírlo hablar con su acento gallego que le da un toque de distinción de alguien que ama lo que hace, lo que ve y donde está.
“Hasta no hace mucho, la gaviota del Caspio (Larus cachninans) se trataba como una subespecie de la gaviota argéntea (Larus argentatus). Cambios posteriores en la taxonomía de las gaviotas de patas amarillas (Liebers et al. 2001, 2004; Yésou 2002) propusieron tratar esta subespecie como una especie monotípica por sí misma denominada gaviota del Caspio (AERC TAC 2003; Olsen y Larsson 2003; Sangster et al. 2007).”
(Testo extraído de birdingiberia)
En los últimos tiempos la gaviota del Caspio se ha extendido desde sus zonas de cría en el Mar Negro, Aral y Caspio hasta Países Bajos, Alemania y Polonia donde se ha hibridado en algunas colonias con gaviota argéntea y patiamarilla.
En el grupo de gaviotas pudimos ver también gaviota argéntea, reidora, cabecinegra, patiamarilla y sombría.
Charrán común de primer invierno en Baldaio.
Agujas colipintas y colinegras, zarapitos reales y trinadores, correlimos, chorlitejos, espátulas, garcetas y garzas buscaban frenéticamente su alimento en la laguna mientras un charrán común nos sobrevuela o un correlimos gordo volaba en compañía de varios chorlitos grises.
Correlimos gordo volando con tres chorlitos grises en Baldaio.
Aguja colipinta en Baldaio.
En la playa el mar estaba movido. Grandes olas sacudían la costa mientras los alcatraces se lanzaban en impresionantes picados, cormoranes grandes, pardelas cenicientas y baleares pasaban volando hacia el sur y varios cormoranes moñudos eran acunados por las grandes olas que batían la costa.
Alcatraz en Baldaio.
La tercera especie que pude bimbar fue el estrilda común en la playa de Barrañán. Observación fugaz en un arbusto de varios ejemplares que inmediatamente levantaron el vuelo. Ave de origen subsahariano que tras diversos escapes se ha ido extendiendo por Portugal hasta Galicia.
Chova piquirroja en la playa de Alba.
Vuelvepiedras en la playa de Matadoiro.
Gaviota cabecinegra inmadura en la playa de Matadoiro.
No faltaron historias de anillas que ilustrarán un nueva entrada. Días de mar, playa, paseos, magnífica compañía y descubrimiento de una preciosa zona a la que volveremos.

martes, 8 de noviembre de 2022

Correlimos de Baird y falaropo picogrueso en Villafáfila.

La Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila con las últimas lluvias ha cogido un poco de agua. El agua es un imán para las aves. Agua que permite descansar y reponer fuerzas a las que están migrando hacia sus cuarteles de invierno y tener la opción de quedarse a aquellas aves que están a punto de llegar a pasar el invierno procedentes del norte de Europa.
Creo que desde la dirección de la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila se deberían de estar replanteando una modernización de las lagunas, me explico. Está claro que la manera de llover, el cuándo y el cuanto ha cambiado. No llueve como lo hacía hace un tiempo. Las lagunas están secas en momentos muy importantes para las aves; momentos en los que miles de aves pasan por nuestra tierra y, si tuvieran agua, pararían a descansar, alimentarse y reponer fuerzas antes de seguir su viaje; quizás se debería de aportar agua a una parte de las lagunas, no digo que se llene la Salina Grande, digo que se debería de aportar agua para cubrir una parte de la salina, la suficiente para permitir a estas aves tener un lugar al que acudir; si no se hace de esta manera las Lagunas de Villafáfila corren el terrible riesgo de desaparecer y entonces sí que lo lamentaríamos de verdad.
Esta agua que ha cogido la Salina Grande ha permitido que las aves paren, descansen y tengamos la opción de verlas. Entre ellas el pasado día 2 de noviembre saltó un sorpresón: Alfonso Rodrigo y José Javier Orduña descubrieron un correlimos de Baird (Calidris bairdii) juvenil en la Salina Grande.
2-11-22: Fotografía histórica de Alfonso Rodrigo que supone
la primera observación del correlimos de Baird en la provincia de Zamora.
Oportunidad única para ver esta especie americana procedente del norte de Canadá, Groenlandia y Alaska que inverna en Sudamérica y supone, según datos de Alfonso Rodrigo, el primer registro para la provincia de Zamora y el segundo para Castilla y León, citas que son las únicas para el interior de la península Ibérica.
En este mapa realizado por Antonio Gutiérrez (muchas gracias por permitirme que ilustre esta entrada) se pueden ver todas las observaciones históricas de correlimos de Baird en España.
Amantes de la naturaleza y las aves provenientes de Zamora, Salamanca, Valladolid, Palencia, Ávila, León o Madrid se han acercado hasta Villafáfila para poder ver y disfrutar de este pequeño correlimos de Baird que es un poco más grande que un correlimos menudo y un poco más pequeño que un correlimos común.
Correlimos de Baird que lleva el nombre de Spencer Fullerton Baird, naturalista estadounidense del s. XIX. Este correlimos se distingue perfectamente del resto de correlimos con los que se mueve. Su larga proyección alar sobresale muy por detrás de la cola lo que le da un aspecto alargado, pico corto, pecho canela, movimientos rápidos, eléctricos manteniendo casi todo el tiempo la cabeza gacha o paralela al suelo y, cuando vuela, lo ves aletear mucho más deprisa que los correlimos comunes.
Correlimos de Baird fotografiado por Manuel Segura el 3-11-22.
Oportunidad única para disfrutar de un ave americana que habrá llegado hasta nuestra tierra impulsada por alguna tormenta o borrasca, ave de unos 15 cm de largo y 46 cm de envergadura que ha recorrido más de 5.000 km a través del océano Atlántico, un viaje lleno de peligros y problemas. Increíble.
En las lagunas también se encuentra un falaropo picogrueso (Phalaropus fulicarius) descubierto por Gary Losada el 27 de octubre. Otra preciosidad proveniente de la tundra ártica de Islandia, Noruega o Rusia que ha parado en Villafáfila durante su viaje hasta sus zonas de invernada en las costas africanas del oeste y el sur.
Fotografía de Gary Losada en el momento de su descubrimiento.
El falaropo picogrueso es un limícola que se alimenta nadando (es un gran nadador, tiene dedos lobulados) cogiendo todo tipo de invertebrados e insectos de la superficie del agua o a muy poca profundidad. Lo hace de una forma muy curiosa ya que da vueltas en círculos en aguas poco profundas para alterar a sus presas y hacer que se acerquen a la superficie y así poder capturarlas.
En España es un invernante muy escaso (solamente en zonas de la costa cantábrica, Galicia y costa atlántica de Andalucía) pero es un migrante regular en sus movimientos desde sus zonas de cría en la tundra ártica y su zona de invernada en las costas africanas. 
El último falaropo picogrueso que se vio en Villafáfila, anterior a este, fue el descubierto por Juan Carlos Milán el 30 de noviembre de 2021.
Fotografía del falaropo picogrueso
tomada el 6-11-22 por José Miguel San Román.
Correlimos de Baird y falaropo picogrueso, dos preciosas aves que dan la importancia que se merece a la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila.
Enhorabuena y gracias a Alfonso Rodrigo y José Javier Orduña por el descubrimiento del correlimos de Baird que nos ha permitido disfrutarlo a muchos amantes de la naturaleza; oportunidad única de observar esta especie americana tan rara en nuestro país y, además, en nuestra querida Villafáfila.
(Quiero agradecer enormemente a Alfonso Rodrigo, Gary Losada, José Miguel San Román y Manuel Segura cederme sus fotografías para ilustrar esta entrada. Gracias y enhorabuena a todos).

domingo, 23 de octubre de 2022

Algunas (muy interesantes) aves anilladas leídas en Zamora en los últimos meses.

Una anilla es como si fuera el DNI del ave que la lleva. Esa anilla llevará un número y un remite nacional que servirá para saber todos los datos de esa ave. Pero no solamente es importante anillar al ave sino que es tan importante o más, intentar seguir sus evoluciones, es decir, saber a dónde va, qué distancia recorre, cuáles son sus rutas y eso se hace mediante la comunicación de todos aquellos que la ven en un lugar, leen la anilla y lo dicen. Con la documentación de esos avistamientos se puede saber mucha información como sus rutas migratorias, su longevidad o sus desplazamientos.
Ver un ave anillada y poder leerla es una enorme satisfacción. Cuando consigues leer una anilla es un momento especial, es el comienzo de un descubrimiento que termina cuando te envían el historial de esa ave anillada y compruebas su edad, de donde viene o sus movimientos.
Esto hacemos un grupo de zamoranos que las observamos y comunicamos sus avistamientos para, una vez que nos lleguen los historiales, irlos archivando por tercer año consecutivo y así tener un registro que nos permita conocer especies, procedencia, recorridos o cuando pasan por nuestra provincia.
En lo que llevamos de año hemos podido constatar 23 especies de aves anilladas (o con GPS) de 10 países diferentes. Estas son algunos ejemplos de las aves anilladas vistas en los últimos meses en la provincia de Zamora. Antes de continuar quiero agradecer enormemente a Alfonso Rodrigo y Gary Losada sus fotografías para ilustrar esta entrada. Las aves que han pasado con GPS formarán parte de otra entrada posterior con historias realmente sorprendentes.
La primera de ellas es la excepcional observación de un águila pescadora (segunda anillada que vemos en Zamora) vista por Alfonso Rodrigo en el río Duero a su paso por Zamora ciudad, con código 7JA los días 16 y 22 de septiembre. Fue anillada en Potsdam-Mittelmark, Brandenburg (Alemania) el 20-6-2007 en el Bird Ringing Centre Hiddensee.
Águila pescadora de 15 años vista en Alemania, Francia y España que aparte de las observaciones en Zamora tiene otra en Barbate (Cádiz).
Yf[H54]-R es un chorlitejo grande observado el 23-9-2022 por Gary Losada en Valdellope (Embalse de Ricobayo). Excepcional observación de una especie de la que tenemos, que yo sepa, solamente dos lecturas en Zamora.
Este chorlitejo grande fue anillado el 19-8-2022 en Makkevika (Noruega). 1 mes, 4 días después y 2462 km recorridos llegó a Zamora. Siendo esta su primera observación.
El 15-3-2022 pude ver en La Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila una aguja colinegra de la exigua población inglesa de WWT Welney (menos de 50 parejas) anillada el 6-3-2016 por Chris Batey.
WL-RL(E)
fue criada en cautividad y liberada posteriormente siendo esta su única observación fuera de Inglaterra y la única observación de esta especie de origen inglés en la provincia de Zamora.
El 13-9-2022 Alfonso Rodrigo observó en Valdellope (embalse de Ricobayo) una avoceta con código mOY/NYO anillada el 25-6-2013 por Hermann Hötker en Fahretofter Westerkoog Vorland (Alemania) siendo esta su primera observación fuera de Alemania y la primera observación en Zamora de esta especie procedente de dicho país.
W-G//L-Of es el código de un archibebe común visto por Juan José González el 2-5-2022 en la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila; anillado en Moeze (Francia) por Philippe Delaporte el 13-4-2013. Siendo esta su única observación en España que se añade a las observaciones en Francia y Holanda.
Las gaviotas reidoras nos han acompañado hasta bien entrado marzo. Entre ellas hay que destacar a Irenka T1CW, gaviota polaca que pasa todos los inviernos en el entorno de Zamora ciudad desde que fue anillada el 22-6-2019 en Zalew Mietkowski (Polonia). Alfonso Rodrigo y yo la hemos visto asiduamente en el río Duero a su paso por Zamora.
Con las observaciones de esta gaviota se puede saber perfectamente su recorrido diario en nuestra zona. Ha sido vista en el CRSU (vertedero de Zamora) donde se alimenta, en el río Duero donde se lava y bebe y en la Balsa del Cuerno (Coreses) donde duerme. Irenka aparte de verse en Zamora ha sido vista 2 veces en Alemania en mayo, por donde pasa camino a su tierra de origen en Polonia.
NA83 es otra de las gaviotas reidoras que pasa todo el invierno en Zamora desde que fue anillada en la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila (Zamora) el 4-7-2019. Todas sus observaciones han sido realizadas por Alfonso Rodrigo o yo en el río Duero a su paso por Zamora o en CRSU (vertedero). No tiene ninguna otra observación aparte de estas en Zamora.
Junto con estas dos, en el grupo de reidoras también aparecen otras anilladas como: NA27, N36P y NA35 todas anilladas en el Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila (Zamora) en 2015 y 2017; vistas en diferentes puntos de la provincia de Zamora o Ávila (la NA27).
El 15-1-2022 pude observar una gaviota reidora con anilla blanca en la Balsa del Cuerno (Coreses). Reidora que no pude leer pero hay una gran porcentaje de posibilidades de que sea J0737 una gaviota reidora que concuerda en edad, color, lugar de la anilla y 5 dígitos con la que se pudo ver todo el invierno en el Vertedero de Gomecello (Salamanca) y que pude ver en compañía del gran Miguel Rodríguez. Fue anillada el 15-6-2021 cerca de Oslo (Noruega).
Pocas gaviotas sombrías nos acompañan a lo largo del invierno pero entre ellas aparecen algunas anilladas como J.9 que pude ver entre el 4 y 16 de enero en el río Duero o en el CRSU de Zamora. Anillada el 14-5-2008 por Roland-Jan Buijs en Vlissingen-Oost (Van Cittershaven), Zeeland (Países Bajos).
18 años tiene esta gaviota sombría (fue anillada en su cuarto año), sus observaciones nos indican su recorrido anual: Holanda, Bélgica, Francia, España (aparte de Zamora ha sido vista en los vertederos de Colmenar Viejo (Madrid) y Gomecello (Salamanca)) y Marruecos (Sidi Ifni).
3:AVR
 es otra gaviota sombría que pude ver el 16-1-2022 en el Río Duero a su paso por Zamora. Fue anillada el 2-7-2015 en Noirmoutieren-L’Île, Le Pilier (Francia). Quitando esta observación en el río, esta gaviota siempre ha sido vista en puertos de Portugal (Figueira da Foz, Porto, Aveiro), Francia y de Inglaterra o en vertederos de España (Colmenar Viejo (Madrid) y Gomecello (Salamanca)).
AM.OJ es una gaviota sombría belga que vimos Alfonso Rodrigo y yo entre los días 7 y 12 de marzo en el río Duero a su paso por Zamora. Anillada el 15-7-2016 por Eric Steinen en West-Vlaanderen (Bélgica).
Este gaviota sombría ya la había podido ver en el río Duero zamorano el 12-11-2017. También ha sido vista en Holanda, Bélgica, Francia y en España en el vertedero de Gomecello (Salamanca) y en la Playa de Bañugues (Asturias).
No podía faltar en este pequeño resumen una de las numerosas espátulas que hemos visto en estos meses. La espátula más vieja de las observadas este año en Zamora con 20 años, anillada el 7-7-2002 en Holanda por Otto Overdijk, fue vista por Alfonso Rodrigo el 3-5-2022 en Manganeses de la Lampreana con código RW[CJ]/aW[CJ]. Ha sido vista en Holanda, Francia y España (marismas de Santoña (Cantabria), marismas de Odiel (Huelva), Puerto de Santa María (Cádiz) y Urdaibai (Vizcaya)).
Febrero fue un buen mes para las observaciones de anillas de agujas colinegras; de las que pudimos leer completas anillas de 2 ejemplares, ambas vistas en la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila y procedentes de Países Bajos: G5WGCC y G1GCGG.
G5WGCC fue vista por Daniel García el 4-2-2022 y Juan José González al día siguiente. Fue anillada el 8-5-2017 por Astrid Kant. G1GCGG fue vista por Juan José González el 12-2-2022 y Gary Losada al día siguiente, siendo anillada por Jan F de Jong el 7-7-2019.
Estos son algunos de los variados ejemplos de las aves anilladas que hemos podido leer en la provincia de Zamora que dan importancia y revalorizan a la naturaleza zamorana.