miércoles, 7 de noviembre de 2012

Barnaclas, gansos y grullas.

El pasado lunes fui a las lagunas de Villafáfila. La tarde estaba soleada aunque, según fue avanzando, el frío, se fue haciendo cada vez más patente y el aire nos cortaba la cara. Había quedado con mi amigo Fernando García, amante de la naturaleza y gran fotógrafo como podéis ver en algunas de las fotografías que ilustran esta entrada.
Las grullas fueron nuestro primer objetivo. Lo que primero te llama la atención cuando ves una grulla es el tamaño que tiene. Pueden llegar a medir 1,15 metros de altura y 2 m de envergadura.
Dos jóvenes grullas en los laterales y dos adultas en el medio.
Estas larguiruchas y espigadas aves son elegantes y charlatanas, no paran de emitir ruidos constantemente como en una conversación sin fin. Vimos varios grupos comiendo en las tierras o volando por encima nuestro. Actualmente hay unas 1.000 en las lagunas; entre ellas vimos muchas jóvenes que son un poco más pequeñas y tienen  la cabeza gris-castaño.
Grulla joven (derecha) y adulta (izquierda).
Las grullas pasan el invierno en España (la última pareja que crió en nuestro país fue en 1954 en la Laguna de La Janda en Cádiz). Lo deciden el segundo año de su vida ya que el primero acompañan a sus padres hasta donde estos vayan. 
Grullas volando sobre las lagunas.
Extremadura y la laguna de Gallocanta (Zaragoza) son los principales lugares en los que las grullas pasan el invierno en la Península Ibérica. Las que llegan a Villafáfila provienen de Europa pasando antes por Gallocanta para dirigirse hasta Extremadura. Algunas se desvían hasta Villafáfila para, unas descansar y después proseguir su camino, y otras quedarse para pasar aquí el invierno.
Grullas y gansos.
Estos días comienzan a llegar los grupos de gansos que actualmente se pueden contabilizar en unos 5.000. Como decía en una entrada anterior junto con los gansos comunes vienen infiltrados y a esos era a los que buscábamos entre los miles de gansos que comían, chillaban o dormitaban en los campos.
Hace unos días había visto un ganso careto que buscamos concienzudamente. No fuimos capaces de encontrarlo pero tuvimos otras sorpresas. Según miraba detrás de una zona de hierbas me pareció ver una barnacla cariblanca. "¡Ahí está. La tengo!" Dije emocionado a mi compañero. La barnacla es un ave que me gusta especialmente. Recuerdo hace unos cuantos años un documental que vi en la televisión en el que estos pequeños gansos anidaban en cortados de considerable altura y cuando nacían, los pollos, saltaban a caída libre desde los alto de los acantilados. La verdad es que me impresionó como caían como pequeñas pelotas rebotando en el suelo (sobreviven un elevado número) y se reagrupaban rápidamente junto a sus padres que los llamaban nerviosos porque los zorros árticos deambulaban en busca de los que pudieran coger.
Barnaclas entre los gansos.
Allí estaba la barnacla cariblanca. Salió de las hierbas y la pudimos ver con total claridad. Estaba un poco lejos para hacerle fotografías pero, algunas testimoniales, le pudimos hacer. Al poco salió una segunda y ¡una tercera! Las tres comían tranquilamente en la pradera. Una de ellas se fue hacia la derecha y la pareja continuó a la izquierda pero nuestra sorpresa fue cuando la que había ido al lado derecho volvió con una compañera. ¡Había cuatro! Nunca había visto ese número en las lagunas. Las dos de la izquierda nos las taparon las hierbas y no las volvimos a ver. Las otras se asustaron por algún motivo, son bastante temerosas y esquivas, marchándose volando hasta un lugar bastante más alejado.
Barnacla cariblanca tumbada a la derecha y
a la izquierda otra asomada detrás de una loma.
Las barnaclas cariblancas se reproducen desde Groenlandia hasta Siberia; siendo de este último lugar de donde proceden la mayoría de las que vemos en España. Siempre es una alegría para mi ver una barnacla y, cuatro, todavía más.
Ganso común con collar azul LKU.
En estos bandos enormes de gansos también aparecen algunos anillados, con su collar de colores en el que llevan un código y un color determinado. Según el color que tenga el collar, vendrán de un país o de otro (lugar donde han sido anillados); por ejemplo si el collar es azul oscuro es de Noruega, Suecia o Dinamarca, si es amarillo es de Alemania, el negro de España o el rojo de Checoslovaquía. Pudimos ver y leer dos collares. Todos azules cuyos códigos eran LKU y LKO. De estos gansos hay pocos datos. Simplemente que son anillados en Noruega y que el LKU fue visto también por Cristian y Víctor Salvador y del otro es las primera observación que existe de él (agradezco a José Miguel San Román su rápida gestión con estos gansos anillados pero todavía no se pueden ver datos en sus fichas, así es que cuando sepa más o algo de sus andanzas lo pondré en una entrada). 
Se ven enormes bandos de estorninos pintos.
Agachadizas (foto tomada hace unos días en mi anterior vista).
Entre grullas y gansos pudimos ver otros habitantes de las lagunas como son: zarapitos reales, miles de avefrías y en algún bando infiltrados chorlitos dorados, miles de estorninos pintos, bandos enormes de azulones con cucharas, silbones, frisos y cercetas comunes, mochuelo, varios laguneros, milanos reales y ratoneros, grupos de perdices, agachadizas, combatientes, tarros blancos, chorlitejos grandes y correlimos comunes, muchas bisbitas y alondras. 
¿Dónde están las perdices?
Milano Real comiendo.
Grupo de gansos levantándose de un campo.

En definitiva parece que este año promete y espero que sigamos encontrándonos agradables sorpresas en los próximos meses aunque me gustaría que tuviésemos cuidado; que respetásemos las líneas de observación, los carteles están para algo o ¿es que estos "individuos" no lo habían visto?, ¡ah! ¿y la valla que había entre medias? 

Sí. Seguramente fuera eso porque no voy a pensar que se metieron en plena laguna a hacerse fotos o a ver a los patos más de cerca. No. No. Eso no lo voy a pensar. Seguro que no habían visto el cartel aunque... una foto tan cerca de los patos, ¡queda genial! y, si además, se levantan todos y se van volando, mejor que mejor, ¡que espectáculo! Todo esto respetando las normas y sin molestar nunca a los animales. 
Sé que los que leéis este blog respetáis las normas pero por desgracia hay mucha gente que "se hace el sueco" que "no sabe leer" o simplemente les da igual lo que ponga. Ahí entra nuestro trabajo con los niños. Hay que hacerles entender desde pequeños que la naturaleza hay que respetarla, cuidarla y quererla; que sí hay unas normas son por y para algo, qué no son porqué sí . Son para respetarlas y para cumplirlas y sí lo hacemos ganaremos todos y, además, nos sentiremos satisfechos.

8 comentarios:

  1. Una entrada maravillosa...es una pasada ver los gansos y las grullas en Villafáfila,este año aun no he ido ...seguramente este mes.
    Muy buenas fotos y texto....Que razón tienes en lo de respetar las cosas!!!Parece que a la gente le cuesta mucho trabajo.
    Saludos.

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    1. Esta época es especial en las lagunas y atrae a gente que no sabe respetar (como los de la fotografía) pero aún así es muchísima más la gente educada y responsable que se acerca a las lagunas y disfruta de su vida. Un saludo y gracias por el comentario.

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  2. Entrada muy interesante y unas fotos espectaculares.
    Un saludo.

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    1. Muchas gracias por entrar en el blog y colaborar con un comentario. Un saludo.

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  3. ¡Que bonita y animada tu entrada de Villafáfila!
    Da gusto ver como, de nuevo, cobra vida ese maravilloso humedal que sirve de refugio y reserva a nuestros amigos de invernada.
    Esperamos pronto poder hacerle una visita porque 'nos has puesto la miel en los labios'.
    Un saludo desde Pucela.
    Pd. Compartimos tu opinión: la mejor forma de salvaguardar nuestro patrimonio natural es la educación y ésta ha de comenzar bien temprana.

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    1. Así es. Villafáfila cobra vida y la temporada se presenta con muchas esperanzas. Gracias por el comentario. Un saludo.

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  4. Acabo de volver de las lagunas y he de decirte que menuda suerte tienes!! Ni rastro de las barnaclas y mira que las busqué.
    A ver si el agua llega pronto y aumentan de tamaño las lagunas.
    Por otro lado, es triste que aún se repitan casos como los que muestras. Ya no es falta de respeto hacia la vida animal, sino una falta de educación enorme.

    Un saludo!

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    1. No te preocupes a veces pasa, en cambio otras, ves un montón. Te animo a que vuelvas. Un saludo y gracias por tu comentario.

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