El pasado 25 de mayo, Jesús Calderón localizó en la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila (Zamora) un alcaudón norteño de la subespecie esteparia (Lanius excubitor pallidirostris). Dos días después, al amanecer, me encontraba esperando a ver si lo podía localizar.
Después de casi dos horas de búsqueda apareció volando y se posó en una de las señales donde comenzó a acicalarse su precioso plumaje mojado por las tormentas de la noche.
Resulta impactante observar las evoluciones de un alcaudón proveniente de las estepas del centro de Asia en plena estepa cerealista zamorana. Alcaudón que se reproduce “desde el suroeste de Rusia y el noreste de Irán hacia el este hasta el sur de Mongolia, el oeste de China, el sureste de Afganistán y el suroeste de Pakistán; parcialmente migratoria, al sur del noreste de África (hasta Sudán y el noroeste de Somalia), la Península Arábiga y el noroeste de la India”.
El alcaudón se limpiaba el plumaje tranquilamente mientras las pagazas piconegras y las gaviotas reidoras volaban de la laguna a los campos en busca de alimento, un escribano triguero cantaba a la mañana y una pareja de collalbas grises observaban al alcaudón que terminaba su aseo matinal.
La aparición de este ejemplar de alcaudón norteño estepario es una fantástica y rarísima observación de las poquísimas que hay en España. Es la quinta vez que se ve un alcaudón de esta subespecie en nuestro país. Las observaciones históricas son las siguientes: (fuente Reservoir Birds)
29-11-2016: Jesús Nieto en la desembocadura del río Andarax (Almería). Primera observación para España
16-1-2017: Alfonso Barragán en Coria del Río (Sevilla).
2-3-2018: Joan Goy en Serra de Daró (Girona).
22-11-2018: Vicente Tamarit en Erms de la Tancada, Delta del Ebro (Tarragona).
El pequeño alcaudón terminó de limpiarse y secarse su plumaje, estiró las alas y se lanzó como un pequeño misil al camino para capturar un insecto y volver a uno de los postes desde el que continuaba observando a sus posibles presas.
Se lanzaba al camino, capturaba un insecto y volvía a uno de los posaderos junto al camino. Operación que realizó en varias ocasiones con una enorme eficacia. Operación que se vio interrumpida cuando una collalba gris se aproximó a la zona en la que se encontraba cazando el alcaudón y este se lanzó a por ella echándola con gran agresividad de la zona que consideraba suya para seguir capturando pequeños insectos.
Enhorabuena por la observación y por las fotos, son una pasada!!!
ResponderEliminarLa aparición de este bicho ha sido espectacular. Algo único. Un saludo.
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